A la vista del tiempo que hace estos días por aquí en Sevilla, ahora me doy cuenta de que no podría vivir en lugares en los que el sol saliera de vez en cuando y lo normal fuera una lluvia constante. Estos dias en los que el agua no deja de golpear insistentemente en los cristales de las ventanas y en los que lo único que te apetece es acurrucarte en el sofá de tu casa y escuchar simplemente el sonido que procuden las gotas al caer.

En estos temas nostágicos estaba yo cuando una canción vino a mi mente. No se porqué la recuerdo ahora pero supongo que la relaciono a una situación nostálgica que es, en realidad, en la situación que me encuentro con tanta lluvia por todos lados (esperemos que salga el sol nuevamente).

LA CHICA DE AYER

Un día cualquiera no sabes que hora es
te acuestas a mi lado sin saber porqué.
Las calles mojadas te han visto crecer,
y tu en tu corazón estás llorando otra vez.

Me asomo a la ventana eres la chica de ayer,
jugando con las flores de mi jardín.
Demasiado tarde para comprender,
chica vete a tu casa no podemos jugar.

La luz de la mañana entra en la habitación
tus cabellos dorados parecen el sol.
Luego por la noche aprendes a escuchar,
canciones que consiguen que te pueda amar.

Me asomo a la ventana eres la chica de ayer.
Demasiado tarde para comprender,
mi cabeza da vueltas persiguiendote.