Como siempre, nuestra querida amiga Rebeca, me hace pensar y darle vueltas a las cosas. Cada vez que leo sus posts surgen, unas veces, preguntas que tenía ya olvidadas y que me descubre que no soy la única que se las plantea, y, otras veces, me abre los ojos hacia cosas, situaciones o sensaciones que nunca hubiera pensado en plantearme.

Siempre he creído que este increíble mundo de "bitácoras cibernéticas" habla más de los sentimientos de las personas que de otras cosas. Porque aunque blogs hay muchos y de muchos temas, siempre está el lado humano al otro lado de la pantalla, que a mi, personalmente, me abre la mente hacia nuevas formas de entender la vida y, creo, me hace ser más tolerante con los pensamientos y sentimientos de los demás.

Hace unos días, Rebeca escribió el post "VERONIKA Y LA LINEA DEL HORIZONTE" en el que reflexionaba sobre que el mundo se repondría (su mundo, su familia, sus amigos) tarde o temprano, si ella moría. En resumidas cuentas, que el mundo seguiría girando y la vida de sus seres queridos con él aunque ella ya no estuviera.

A raíz de este post, y como le escribí a ella en los comentarios, vino a mi mente mi eterna pregunta sobre el más allá. De hecho, no paro de darle vueltas a la cabeza, otra vez. Ya se que no es solo mía la pregunta, que ya mucha gente también se pregunta que es lo que habrá o no habrá. Y si hay algo, ¿qué religión llevará razón? ¿A dónde iré cuando haya muerto? ¿Dejaré de existir? ¿Me iré a otro plano? ¿Existen los fantasmas? Si es así, ¿seré uno? ¿Existe un todo, una energía superior a la que me uniré cuando muera? ¿Volveré a este mundo reencarnada en otra persona?

Como siempre son muchas preguntas y muy pocas respuestas. También he creído siempre que con respecto a esto los que tienen suerte son las personas que creen en algo o ente superior y no los ateos. Es mucho más difícil enfrentarte a la nada (al menos para mi) que enfrentarte a lo conocido. Si tienes creencias en alguna religión sabes perfectamente dónde irás llegado el momento de tu adiós. Además, todas te ofrecen una eternidad que podrás compartir precisamente con tus seres queridos. Así, ¿quién no se enfrenta a la muerte? Total, visto con esos ojos, ¿no parece una prolongación de la vida? Y además, sin los inconvenientes del dolor y toda la maldad que podemos llegar a encontrar en el planeta.

No me malinterpretéis. No juzgo ni a los que tienen creencias ni a los que no la tienen. Los que la tienen argumentarán que en esta vida tienen que seguir unas reglas para poder disfrutar de la eternidad prometida mientras que los que no las tienen sólo tienen que ajustarse a las reglas de la sociedad.

Para mi la diferencia entre unos y otros es la esperanza a que haya lo que haya en el más allá será algo mejor que lo que hay aquí, la esperanza de encontrar una felicidad eterna.

¿Qué es el más allá? ¿Qué es para vosotros el más allá? Como le dije a Rebeca, no se la respuesta y pienso volver a aparcar la pregunta hasta el final de mis días. Porque es una pregunta sin respuesta "verdadera". Es una pregunta que cada uno se puede responder según la esperanza que tenga.

P.D: No estoy triste. De hecho, es un tema que no va para nada con el estado de ánimo que tengo últimamente. Lo que ocurre es que quería hablar de ello para poder volver a dejarlo atrás aunque sea por un tiempo. De hecho, tengo noticias que según se desarrollen los acontecimientos contaré en breve.